En la actualidad, la
industria del cannabis ha ido en crecimiento constante y diversas son las
formas en las cuales los usuarios pueden acceder a la planta o sus derivados.
Una de las formas de acceso que avanza a la par a medida que también lo hace la
industria es la creación de dispensarios, los cuales varían un poco en su
dinámica de acuerdo al estado legal del uso de la planta en la región donde se
encuentran este tipo de establecimientos; estos son de gran importancia en el
campo medicinal, ya que en los que se dispensa cannabis para uso terapéutico,
el paciente puede estar bien informado y sentirse seguro.
El Cannabis Buyers Club,
que se inauguró en 1992 en San Francisco, fue el primero de su tipo; desde
entonces los dispensarios se han duplicado en todo Estados Unidos y ahora se
encuentran en más de la mitad del país, así como también hay múltiples
dispensarios en otros países del mundo.
Los dispensarios
son tiendas donde se pueden comprar legalmente productos derivados del cannabis
y sus flores; y como todo, también tienen su historia y características que los
distinguen.
Dado que las leyes
federales de Estados Unidos impiden que las farmacias puedan vender cannabis
(de cualquier tipo), era necesario encontrar un método alternativo que
permitiera vender legalmente los productos medicinales del cannabis sin
incurrir en ningún delito. Entonces en los dispensarios los pacientes pueden
comprar medicamentos del cannabis, y esa es la solución para vender
productos de esta planta de manera legítima y conveniente.
Por ejemplo, el estado
de California permitió el acceso a dispensarios de cannabis medicinal para
tratar pacientes con HIV, la pérdida de apetito, la artritis, los síntomas de
los efectos secundarios del tratamiento tradicional para el cáncer, el dolor
crónico, las migrañas, las náuseas y la epilepsia.
Por otra parte,
Colorado, aprobó el acceso a dispensarios de cannabis para pacientes en
tratamiento para el cáncer, VIH, caquexia, dolor intenso, náuseas intensas y
convulsiones resultantes de espasmos musculares.
Vale la pena señalar que
las industrias farmacéuticas del cannabis están sujetas a un control de la
calidad del producto para garantizar la seguridad del consumidor, además de
utilizar las mejores flores de la industria farmacéutica, los funcionarios
realizan seguimiento y vigilancia a los productos de manera adecuada para
garantizar los beneficios para los pacientes. y también para poder hacer una
determinación precisa de sus verdaderos efectos, estos cuentan con las
instalaciones necesarias para realizar sus operaciones y analizar los
productos.
En los dispensarios se comercializan varios productos elaborados
con cannabis y estos tienen establecido estándares de calidad para que lleguen
a las manos de los pacientes con mucha seguridad, lo más importante es la
responsabilidad de etiquetar de forma veraz y clara para que el usuario tenga
un producto garantizado.
La accesibilidad a este
tipo de establecimientos garantiza que el paciente pueda estar informado,
orientado y sentirse seguro al momento de decidir usar los beneficios de la
planta para aliviar su afección.
Fuentes
Lisette Wijnkoop / Arno
Hazekamp. (...). Hacia una mejor calidad de los productos cannabinoides. 2021,
de fundacion CANNA Sitio web: https://www.fundacion-canna.es/hacia-una-mejor-calidad-de-los-productos-cannabinoides